El intestino alberga una red de más de 100 billones de microorganismos, que crean un vasto microbioma que ayuda al cuerpo a descomponer los alimentos y absorber los nutrientes. Sin embargo, la función del sistema intestinal va más allá de la digestión, por lo que es importante mantener el bienestar gastrointestinal.

¿Sabías que el intestino tiene una conexión directa con el cerebro? Esto se debe al eje intestino-cerebro, lo que significa que la salud gastrointestinal podría influir en la salud mental, según diversos estudios. De hecho, algunos científicos se refieren al intestino como "el segundo cerebro".

Por otra parte, las investigaciones indican que el sistema digestivo puede afectar o desempeñar un papel fundamental en la salud inmunológica, el sueño saludable, la nutrición y el metabolismo general. Además de otros trastornos, como la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares.

Cómo cuidar tu sistema intestinal

Teniendo en cuenta los datos facilitados anteriormente, un intestino debilitado puede tener un impacto negativo en la salud general. No solo lo relacionado con los problemas digestivos (diarrea, gases, hinchazón o estreñimiento), sino también la inmunidad debilitada, las alteraciones del sueño, la fatiga o el aumento del estrés y la ansiedad, entre otros.

Hay varias formas de mejorar o mantener la salud intestinal, desde llevar una dieta rica en fibra que contenga frutas y verduras, cereales integrales, legumbres y frutos secos hasta practicar ejercicio regularmente o dormir lo suficiente para ayudar a reducir el estrés. Además, algunos expertos aconsejan recurrir a la suplementación, con la aprobación de tu médico.

Los mejores suplementos para el confort digestivo

Algunas vitaminas y nutrientes podrían reforzar tu salud intestinal. Estas se incluyen en ciertos suplementos alimenticios que pueden servir de gran ayuda para promover tu confort digestivo, siempre y cuando lo consultes en primer lugar con un profesional de la salud, para que te pueda asesorar acerca de los productos e ingredientes que mejore se pueden adatar a tus necesidades. Estos son algunos de los complementos nutricionales más recomendados para apoyar tu sistema intestinal:

  • Probióticos y prebióticos

Se considera que un intestino sano tiene una cantidad equilibrada de probióticos. Estos se encuentran de forma natural en fuentes de alimentos fermentados, como el yogur griego, la kombucha y el kimchi. También se pueden consumir en forma de suplementos que suelen contener organismos vivos, como bacterias y un tipo de levadura.

Los suplementos probióticos incluyen bacterias “buenas” del intestino que ayudan con la digestión. Estas son ideales para tratar ciertos problemas gastrointestinales y apoyar la digestión regular, incluso pueden ser de gran utilidad para el alivio de la diarrea y los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII).

Respecto a los prebióticos, se trata de fibras que el cuerpo no puede digerir, las utiliza como combustible para que las bacterias probióticas favorezcan su crecimiento en el intestino. Estos presentan mayor contenido de fibra y se pueden encontrar en la mayoría de las frutas y verduras. Asimismo, los prebióticos también se pueden adquirir en el campo de la suplementación, combinándolos, si es necesario, con probióticos.

Cáscara de psyllium

  • Cáscara de psyllium

Conocido por su alto contenido de fibra, con efecto laxante, el psyllium es un ingrediente que puedes encontrar en forma de suplemento para mejorar tu tránsito intestinal. Principalmente se comercializa la cáscara de psyllium en polvo, indicado para mover los desechos a través de los intestinos y aliviar el estreñimiento. Además, es un producto que contribuye al aumento del volumen de las heces, lo que podría ayudar a combatir la diarrea.

  • Vitamina D

¿Sabías que la deficiencia de vitamina D es muy común? En casos de niveles bajos de este nutriente, un proveedor de atención médica puede sugerir suplementos a base de vitamina D. Es más, una revisión de 2020 indica que esta vitamina puede tener propiedades antiinflamatorias en el tracto digestivo y ayudar a regular el equilibrio en la pared gastrointestinal.

  • Vitamina C

Se trata de una vitamina soluble en agua, lo que significa que el cuerpo excreta cantidades excesivas en lugar de almacenarlas, y debe consumirse diariamente a través de alimentos o suplementos. La vitamina C puede aumentar potencialmente la producción corporal de ácidos grasos de cadena corta que pueden actuar como mediadores en la conexión intestino-cerebro y brindar protección a la barrera intestinal. Puedes encontrar este nutriente en naranjas y brócoli.

  • Glutamina

Es un aminoácido que se encuentra de forma natural en el cuerpo y sirve de apoyo para el sistema intestinal. Los suplementos de L-glutamina contribuyen al alivio de la diarrea inducida por cirugía, infecciones o estrés. Eso incluye a las personas con demasiadas bacterias nocivas en sus tractos digestivos y aquellos que toman medicamentos específicos, consultando anteriormente con el médico.

Por otro lado, un ensayo clínico de 2019 que explora la suplementación con glutamina en personas con síndrome del intestino irritable (SII) encontró que este aminoácido podría ayudar a mejorar los síntomas del SII. Por ejemplo, aliviando el dolor abdominal y la hinchazón.

  • Jengibre

La medicina asiática utiliza el jengibre para tratar los dolores de estómago. En Occidente, este se utiliza para aliviar las náuseas y los vómitos durante el embarazo. Esto significa que el uso de este vegetal está extendido a lo largo del mundo por sus beneficiosos para la salud.

El jengibre es una raíz que aporta propiedades antiinflamatorias y antioxidantes y puede tener un impacto positivo en la microbiota intestinal. De hecho, según los resultados de un estudio reciente, los investigadores descubrieron que aquellos que consumieron jengibre tenían una mayor diversidad bacteriana en sus microbiomas intestinales.

  • Curcumina

Este polifenol se encuentra comúnmente en la especia cúrcuma, conocida por sus efectos antiinflamatorios y antioxidantes. Una investigación actual sugiere que los suplementos de curcumina pueden promover la salud de las cepas de bacterias intestinales beneficiosas.

  • Regaliz y manzanilla

El regaliz se ha utilizado durante mucho tiempo para tratar los síntomas de la indigestión, como la acidez estomacal y el reflujo ácido. En su forma no purificada, el regaliz también puede tener efectos secundarios, incluida la contribución a la presión arterial alta en algunas personas. Por su parte, el DGL es un extracto específico de regaliz al que se le ha eliminado una determinada sustancia química y no parece tener tantos efectos secundarios. Aun así, se aconseja que las mujeres embarazadas no tomen DGL.

En el caso de la manzanilla, puede ser más que un té calmante, ya que esta es su característica más popular. Así mismo, se ha probado la manzanilla para tratar problemas digestivos como malestar estomacal, cólicos y náuseas, así como ansiedad e insomnio. Debes saber que las personas con alergias a algunas plantas como la ambrosía podrían tener una reacción alérgica a la manzanilla.

¿Por qué tomar suplementos para la salud intestinal?

Los trastornos en el sistema intestinal son realmente perjudiciales para la salud, sobre todo dependerá del grado en el que se encuentren estas dolencias. Estas pueden afectar a la digestión, la absorción de nutrientes, el sistema inmunológico, la regulación del azúcar en sangre o el control del peso, entre otros factores. Además, tal y como hemos adelantado en párrafos anteriores, la salud intestinal también puede afectar a la salud mental, debido a la conexión intestino-cerebro.

Las medidas que puedes tomar para apoyar la salud intestinal incluyen cambiar tu dieta y estilo de vida y, en algunos casos, recurrir a la suplementación. Si no tienes ningún síntoma y sigues una dieta rica en fibra, es probable que tengas un intestino sano. En cambio, si tienes problemas de estreñimiento, diarrea, gases, hinchazón y dolor abdominal, puede ser una señal de que tu intestino necesita ayuda adicional. Estos síntomas no necesariamente significan que tu intestino no está sano, pero puede que solo necesite un poco de atención para un funcionamiento óptimo.

Concretamente, un suplemento adecuado puede ayudar a tratar afecciones como el síndrome del intestino irritable (SII) o las intolerancias alimentarias y reducir los síntomas gastrointestinales desagradables. Recuerda consultar en primer lugar con un profesional de la salud para que te asesore de manera individual y personalizada.

Suplementación para una digestión regular

¿Cuándo recurrir a la suplementación para una digestión regular?

Si no tienes síntomas gastrointestinales y ya llevas una dieta variada y rica en fibra, es posible que no necesites un suplemento para la salud intestinal. Sin embargo, existen suplementos que pueden ofrecer un impulso a la salud intestinal, incluidos los alimentos ricos en fibra y los suplementos probióticos para ayudar a aumentar las bacterias saludables en el intestino. Además, los prebióticos pueden servir de ayuda para que las bacterias saludables (o los probióticos) prosperen.

Respecto a los probióticos, estos se encuentran naturalmente en los alimentos fermentados (yogur, kimchi, kombucha y otros), mientras que los prebióticos se pueden encontrar en cualquier alimento rico en fibra (frutas, verduras, legumbres, etc.). Si tu dieta carece de estos alimentos la suplementación podría ser realmente útil en tu caso. De hecho, los suplementos probióticos pueden ser beneficiosos para tomar si se sigue un tratamiento con antibióticos, ya que estos medicamentos pueden destruir algunas bacterias buenas en el intestino.

A continuación, se enumeran las afecciones intestinales que, según las investigaciones, pueden beneficiarse de la suplementación:

  • Estreñimiento

Se ha demostrado que los productos con fibra y laxantes, como la fibra de cáscara de psyllium molida y el magnesio, mejoran el estreñimiento. Asimismo, los productos con aceite de menta con recubrimiento entérico pueden aliviar los síntomas relacionados con el síndrome del intestino irritable con estreñimiento.

  • Diarrea

Los productos diseñados para agregar volumen, disminuir el tiempo de tránsito o reducir los espasmos son remedios comprobados para la diarrea y la urgencia. Estos incluyen el psyllium molido, el policarbofilo de calcio y las cápsulas de aceite de menta con recubrimiento entérico.

  • Intolerancia a los FODMAP

Este tipo de alimentos pueden provocar dolor abdominal, gases, hinchazón y diarrea, en particular en personas con SII o SIBO activo. En estos casos, se pueden utilizar enzimas digestivas específicas de los FODMAP, como la lactasa, la xilosa isomerasa y la alfa-galactosidasa, o una fórmula natural a base de enzimas. En caso de duda consulta con tu médico para que la recomendación sea más específica.

  • Intolerancia a la lactosa

En ocasiones, el cuerpo no produce suficiente lactasa, es decir, la enzima responsable de digerir la lactosa. Esto puede causar gases, hinchazón y diarrea. Debes saber que un suplemento de enzima lactasa ayuda a prevenir los síntomas cuando se toma junto con alimentos con lactosa (lácteos en general).

  • Sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado (SIBO)

En este caso, las bacterias en el intestino delgado pueden responder a los alimentos con alto contenido de FODMAP y provocar gases, hinchazón o heces irregulares. No se ha demostrado que ningún suplemento trate o prevenga el SIBO, pero el uso a corto plazo de enzimas digestivas específicas de FODMAP puede ayudar a minimizar los síntomas desencadenados por alimentos con alto contenido de este tipo de alimentos.

  • Intolerancia a la histamina

Si te han diagnosticado intolerancia a la histamina, puedes utilizar una combinación de tratamiento médico y dietético para controlar los síntomas. La histamina se encuentra en muchos alimentos, desde el vinagre hasta los fiambres, por lo que una de las alternativas puede ser complementar con DAO adicional, esta es la enzima responsable de la descomposición de la histamina y puede ayudar a reducir síntomas como diarrea, dolor abdominal y reacciones cutáneas.

Los beneficios de las enzimas digestivas

La investigación sugiere que la suplementación con alfa-galactosidasa puede reducir los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII). La alfa-galactosidasa descompone el galactooligosacárido (GOS), que se encuentra en alimentos como las legumbres y los anacardos.

A rasgos generales, las enzimas digestivas son beneficiosas para el sistema intestinal, especialmente en personas que padecen algún tipo de afección o molestia regular en al zona. Por ejemplo, aquellos que padecen SII y tienen intolerancia a la lactosa pueden beneficiarse de las tabletas de lactasa.

Por otra parte, has de saber que los síntomas y el tratamiento del síndrome del intestino irritable difieren de una persona a otra. En este momento, no hay evidencia suficiente para respaldar el uso de suplementos de enzimas digestivas para tratar esta afección, aunque diversos estudios han demostrado ser prometedores. Lo primordial es consultar con tu médico o dietista sobre qué suplementos pueden ser mejores para tu caso particular.

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