La regulación óptima de los niveles de serotonina y dopamina contribuyen al equilibrio del estado de ánimo y favorecen el mantenimiento de la salud mental en condiciones normales. Esto significa que estos dos componentes pueden ser la herramienta ideal para personas que padecen ansiedad, depresión y otras afecciones que interfieren en el bienestar mental.
La dopamina es un neurotransmisor implicado en una variedad de funciones cerebrales. Los suplementos de dopamina suelen incluir L-tirosina, Mucuna pruriens, L-teanina y Rhodiola rosea, mientras que alimentos como las almendras y los plátanos también son conocidos por su efecto positivo en el aumento de dopamina en el cuerpo.
Por otra parte, los neurotransmisores como la dopamina suelen facilitar todo lo que hace el cerebro al transportar las señales químicas que impulsan las funciones físicas. Sin embargo, las señales pueden cruzarse cuando la química del cerebro se desequilibra y puede experimentar ciertos trastornos en múltiples áreas del organismo. De hecho, según un estudio reciente, la dopamina desempeña un papel decisivo en el comportamiento, la motivación, la función cognitiva, el sueño, la atención y el aprendizaje.
Respecto a la deficiencia de dopamina, puede que esta no cause problemas de salud física o mental en algunas personas. No obstante, puede producir falta de energía o deseo sexual, cambios de peso, temblores, estreñimiento, cambios de humor, calambres musculares, alucinaciones, pérdida del equilibrio y dificultad para dormir. Además, aquellos que no cuentan en su organismo con los niveles requeridos de dopamina pueden sentir ansiedad u otros trastornos similares.
Por lo tanto, la dopamina es una sustancia química del cerebro que desempeña un papel importante en la regulación de la cognición en general, además de ayudar en la toma de decisiones y el sueño reparador.
A rasgos generales, el sistema nervioso controla eficazmente la producción de dopamina, pero existen varios factores del estilo de vida y condiciones médicas que pueden hacer que los niveles de dopamina disminuyan exponencialmente. Los síntomas de niveles bajos de dopamina incluyen pérdida de placer en cosas que alguna vez te resultaron agradables, falta de motivación y apatía.
A continuación, enumeramos una serie de ingredientes naturales y suplementos alimenticios que puedes encontrar en tu herbolario de confianza y sirven de apoyo para aquellos que desean aumentar sus niveles de dopamina y serotonina en el cuerpo:
Son microorganismos vivos que recubren el tracto digestivo y ayudan a que tu cuerpo funcione correctamente. Estos no solo benefician la salud intestinal, sino que también contribuyen a la prevención y el tratamiento de diversos problemas de salud mental, como los trastornos del estado de ánimo.
Por otra parte, está comprobado que las bacterias intestinales dañinas disminuyen la producción de dopamina, mientras que los probióticos tienen la capacidad de aumentarla, lo que puede intervenir en un mejor estado de ánimo. Alimentos fermentados como el yogur o el kéfir son ideales para añadir un probiótico en tu dieta.
Varios estudios en ratas han demostrado una mayor producción de dopamina y una mejora del estado de ánimo y la ansiedad con suplementos probióticos. Asimismo, un estudio en personas con síndrome del intestino irritable (SII) encontró que quienes recibieron este tipo de suplementación tuvieron una reducción de los síntomas depresivos, en comparación con quienes tomaron placebo.
Es una planta originaria de China que se ha utilizado durante siglos como remedio para diversas afecciones de salud. Aunque las investigaciones son inconsistentes, los suplementos de ginkgo biloba pueden mejorar el rendimiento mental, la función cerebral y el estado de ánimo en determinadas personas.
Algunos estudios han encontrado que la suplementación con el extracto de esta planta medicinal puede ayudar a aumentar los niveles de dopamina en ratas, lo que ayuda a mejorar la función cognitiva, la memoria y la motivación de estas. De todos modos, se necesita más investigación antes de que los científicos puedan determinar si el Ginkgo biloba también aumenta los niveles de dopamina en humanos.
La curcumina es el ingrediente activo de la cúrcuma y se cree que tiene efectos antidepresivos, ya que aumenta la liberación de dopamina.
Un pequeño estudio controlado encontró que tomar 1 gramo de curcumina tenía efectos similares a los del Prozac para mejorar el estado de ánimo en personas con trastorno depresivo mayor (TDM). Sin embargo, en este caso también se necesitaría más investigación para comprender el papel de la curcumina en el aumento de los niveles de dopamina en humanos y su uso en el tratamiento de la depresión.
Se trata de una planta adaptógena que se usaba originalmente para ayudar con mejoras físicas como la fuerza y la resistencia. Con el paso del tiempo, se han hecho populares y se han ido extendiendo sus beneficios sobre la salud mental.
Por lo tanto, los suplementos de Rhodiola rosea favorecen el bienestar físico y mental general, especialmente en personas que soportan altos niveles de estrés. También apoya la función cognitiva saludable y proporciona energía, ideal a la hora de promover el bienestar emocional.
La deficiencia de magnesio se ha asociado durante mucho tiempo con la depresión. Si bien no se comprende totalmente el vínculo exacto, según una investigación reciente, los ratones que tenían niveles bajos de magnesio también tenían niveles bajos de dopamina. Complementar con magnesio a ratones con deficiencia del mineral y dopamina resultó beneficioso para los animales.
Cabe señalar que el magnesio se encuentra de forma natural en vegetales de hojas verdes como las espinacas, o en alimentos integrales como el brócoli y varios frutos secos. Incluso puedes obtener magnesio del chocolate amargo, una manera fácil de ayudar naturalmente a aumentar la dopamina.
¿Sabías que los niveles bajos de vitamina D en el cuerpo puede tener consecuencias bastante desagradables? Uno de los efectos positivos que tiene la vitamina D en el cuerpo es la forma en que apoya la función normal de la dopamina, así como la de otros neurotransmisores.
Pese a no haberse estudiado en detalle, las investigaciones científicas en animales han demostrado que los ratones con niveles bajos de vitamina D también tenían niveles reducidos de dopamina. No solo eso, sino que cuando esos niveles de vitamina aumentaron, también hubo un incremento de dopamina.
Además, la vitamina D interviene de manera positiva en diversas funciones del organismo, como los sistemas muscular y óseo.
Es un ingrediente natural que se ha usado en la medicina tradicional china desde la antigüedad. Su raíz se puede consumir cruda o al vapor, pero también está disponible en otras formas, como té, cápsulas o pastillas.
Los estudios han demostrado que el ginseng puede mejorar las habilidades cerebrales, incluido el estado de ánimo, el comportamiento y la memoria. Estos subrayan la capacidad del ginseng para ayudar a aumentar los niveles de dopamina. También se ha sugerido que ciertos componentes del ginseng, como los ginsenósidos, son responsables del aumento de dopamina en el cerebro y de efectos beneficiosos sobre la salud mental, incluida la función cognitiva y la atención.
La serotonina y la dopamina son dos sustancias químicas esenciales que afectan la salud mental y otras funciones corporales. Mientras que la primera se relaciona con el estado de ánimo, la tranquilidad, el sueño, la concentración y la temperatura corporal; la otra es conocida como “la hormona del bienestar”. De hecho, la dopamina química afecta la motivación, la vitalidad, el deseo, el estado de alerta y el flujo sanguíneo.
Esto significa que un control saludable de dopamina y serotonina puede aportarnos energía y vitalidad. Por ejemplo, los niveles bajos de serotonina pueden manifestarse como irritabilidad, agitación y dificultad para mantener la calma. Afortunadamente, existen algunas formas naturales que nos posibilita recargar estas reservas de químicos:
El ejercicio es una de las mejores formas de aumentar tanto la dopamina como la serotonina. Desde una simple caminata hasta el levantamiento de pesas, cualquier actividad física controlada puede ayudar a aumentar estos químicos. Es más, los estudios demuestran que el ejercicio aeróbico aumenta la dopamina y la serotonina en partes específicas del cerebro.
La dieta juega un papel fundamental en el control del peso y la salud en general. Diversas investigaciones han demostrado que algunos alimentos pueden afectar directamente los niveles de serotonina y dopamina, especialmente aquellos ricos en proteínas, ya que aportan una liberación constante de ambas sustancias químicas. Las proteínas contienen aminoácidos que ayudan a regular el estado de ánimo y la concentración.
Cada vez son más las personas con problemas para dormir o aquellos que ven reducidas sus horas de sueño y descanso. Cuando las personas tienen falta de sueño, los niveles de dopamina caen significativamente por la mañana. Debes saber que la serotonina, junto con la melatonina, ayuda a dormir bien por la noche. Lo aconsejable es dormir al menos 7 horas al día para ayudar a controlar ambas sustancias químicas.
Los neurotransmisores están vinculados al estado mental emocional. Con el estrés del mundo actual, la meditación y la atención plena pueden ayudar a nuestro estado de ánimo. La meditación se puede realizar en cualquier lugar y ayuda a tener una mente relajada y concentrada. La práctica también aumenta la gratitud, que está vinculada a la felicidad.
Además, puedes acompañar estas buenas prácticas con la suplementación adecuada. Por ejemplo, el aminoácido triptófano es el precursor de la producción de serotonina, lo puedes encontrar como suplemento que favorece el equilibrio del estado de ánimo. Por su parte, la mucuna contiene L-dopa, otro aminoácido esencial que contribuye a elevar el estado de ánimo y puede disminuir la depresión. Otros complementos nutricionales en este ámbito son el magnesio, la Rhodiola Rosea y la hierba de San Juan.
Para terminar, podemos decir que la dopamina es una sustancia química cerebral que influye en el estado de ánimo y puede ayudar a regular los movimientos corporales. Generalmente, sus niveles están bien regulados por el cuerpo, pero puedes aumentarlos de forma natural haciendo algunos cambios en la dieta, el estilo de vida o recurriendo a la suplementación.
Una dieta equilibrada que contenga proteínas, vitaminas, minerales y probióticos adecuados y una cantidad moderada de grasas saturadas puede ayudar a tu cuerpo a producir la dopamina que necesita. Además, los factores del estilo de vida también son importantes: dormir lo suficiente, hacer ejercicio, escuchar música, meditar y pasar tiempo al sol, por ejemplo.
Por último, tras revisar varios productos, hemos llegado a la conclusión de que los mejores suplementos de serotonina y dopamina pueden beneficiar enormemente a quienes buscan mejorar su estado de ánimo, sus niveles de energía y su claridad mental. Estos complementos nutricionales pueden ayudar a equilibrar los niveles de neurotransmisores, lo que aumenta la motivación, la relajación y la concentración.
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